Reviews : Orphic Signs (2014)

Willowtip Records

The 2nd full length from Japan’s fastest and most brutal export. Extremely fast and technical but with awesome groove parts this is a release not to be missed as Desecravity have somehow managed to improve on their amazing debut.

Son of Flies (Italy)

Se non si conoscesse la vera provenienza dei DESECRAVITY, probabilmente si darebbe per scontato una sola cosa: “Sono Americani!”. Invece non è così. Questi tre deathster sono giapponesi e vivono/agiscono in quel di Tokyo.

Se con il primo “Implicit Obedience” del 2012 (pubblicato sempre dalla Willowtip Records) mi avevano trasmesso delle buone sensazioni in quanto a potenzialità, con il nuovo “Orphic Signs” posso confermare a pieno titolo l’ottima impressione avuta due anni or sono. Non c’è nessun dubbio sulla validità della band del Sol levante. Lo scopo è uno solo, ossia non concedere respiro all’ascoltatore, non lasciare scampo tra un brano e l’altro, non ammettere compromessi e caricare d’odio l’intera proposta. Tutto questo i Desecravity lo sanno fare nel migliore dei modi e ce lo vomitano addosso con una determinazione che fa male. La pulizia dei suoni è davvero esagerata, ma come alcuni di voi sapranno già, questa non sarà l’ultima band a seguire certe coordinate in sede di produzione. Tale componente aumenta l’intensità di un sound malefico, nel quale si incarnato riff serrati, line di basso che inturgidiscono la struttura dei brani e un drumming velocissimo.. a dir poco disumano. La voce cavernosa del chitarrista/cantante Shogo Tokita riesce ad adattarsi al meglio sul tappeto sonoro. Un lavoro che farà gola agli appassionati del death metal più spedito, tecnico e animalesco (prendete come punto di riferimento gli Hate Eternal di Erik Rutan o gli alienanti Gigan). Io resto dell’idea che un gruppo come i Desecravity, dopo pochi ascolti, potrebbe farvi passare oltre. Considerazione soggettiva.

Xtreem Music (Spain)

DESECRAVITY es un trío japonés que abraza un eufórico y complejo estilo dentro del amplio mundo del Technical Brutal Death Metal. Dicen que “cuando el río suena, agua lleva”, aunque para el caso podemos afirmar que, por segunda vez, “el cántaro va a la fuente”. Esta banda parece tener muy claro el tipo de impacto sonoro que busca para su destructiva propuesta: pulcritud, pegada y definición, así como mucha fuerza y cierto toque sofisticado. Algo fácil de solucionar, siempre que instrumentistas, música y estilo se presten a ello, sobre todo cuando además el producto se termina en los Mana Recording Studios de Florida.

Tras un primer demo (2009) absolutamente demencial y de una calidad alucinante, esta genial banda nipona debutó en 2012 con “Implicit Obedience”, disco tremendamente terrible que se benefició del tratamiento del maestro Erik Rutan, cuya producción no deja lugar a dudas. Para su reciente “Orphic Signs” (Willowtip Records), las labores de mezcla y mastering han corrido a cargo del ingeniero y productor Brian Elliott, colaborador asiduo del líder de HATE ETERNAL desde hace varios años, habiendo dejado su firma en discos como “Fury & Flames”, “Evisceration Plague”, “Torture” o “Conceived in Sewage”. Solo queda decir que los resultados son impecables, pues desde el citado santuario sonoro se nos entrega otro engendro terrorífico, marca de la casa, y que lejos de resultar sintético (como puede pasar con las producciones de este tipo de onda) goza de un acabado denso pero lo suficientemente natural.

La música de DESECRAVITY es compleja y directa a partes iguales, abarcando un espectro que implica toques viejo estilo de Florida (que evidentemente idolatran) hasta los planteamientos modernos del Brutal Death técnico: por un lado desarrollan bastantes shreddings con muy buena intercalación de técnicas como trémolos, Tapping, Legato o Sweep, pero también integran ritmos de apariencia básica que se desglosan en patrones compuestos, de forma que algunas canciones adquieren una vertiente levemente progresiva a la que hay que sumar algunos solos y licks en plan fusionero que recuerdan al estilo de bandas como ANOMALOUS o ARKAIK. Si todo esto se produce sobre una salvaje base con HATE ETERNAL como principal referencia, y sumamos numerosas ideas diferentes en forma de riffs, cortes y todo tipo de tempos, obtenemos el cocktail apropiado. Incluso la labor vocal puede recordar, en parte, al sonido de bandas afines al sonido Morrisound noventero, como BRUTALITY o MONSTROSITY. Pero lo realmente importante es que estos japoneses no se basan en copiar ni en parecerse a nadie, sino que claramente exploran numerosas vías de escape, habiendo logrado un disco brutal, íntegro y creativo, no exento de una exótica visión personal implícita, dada la procedencia de los ejecutantes y su evidente nivel intelectual, en este caso aplicado a las notas musicales y ajustándose al estilo a la perfección, o por lo menos dejando pocas dudas acerca del resultado de su trabajo.

También hay que señalar la sobria portada realizada por el artista Ryhoei Hase, especialista en la hibridización gráfica entre seres los humanos y los lobos, hienas, conejos o diferentes felinos y que ya se había hecho cargo del salvaje arte de presentación de “Implicit Obedience”, debut de la banda. En “Orphic Signs” ha plasmado una mística composición en la que conviene fijarse bien para observar los detalles en su máximo esplendor, muy en concordancia con la temática de unas oscuras letras de orientación mitológico-histórico-fantástica escritas por el baterista Yuichi Kudo, polivalente músico que a su vez es el creador de todas las canciones.

El disco comienza con “Deviltry”, veloz trallazo de tintes bélicos y rapidísimas ráfagas shred en el que además se dan cita multitud de cambios y recursos, como si de una pequeña odisea se tratase. Desde el Brutal Death más esquizofrénico a los riffs clásicos sonido Thrash/Death que sirven de soporte para que Mr. Kudo realize sus exhibiciones percusivas.

“Bloody Terpsichorean Art” es una pieza rapidísima que abarca altas dosis de adrenalina, veloces e insistentes trémolos y buenas figuras realizadas por el serpenteante bajo eléctrico de Daisuke Ichiboshi, por no hablar de unas guitarras de locura, en ocasiones hipnóticas. Este track se ha empleado como promoción a través de un video clip en el que puede apreciarse la actitud global de la banda, aunque sea a través de una simple figuración. Contiene muy buenas partes de sabor semi-marciano, en onda cercana al progresivo, lo justo para no abrasar en exceso.

Muy buen comienzo para “Depth of Misery”, fusionero y prog, que invita a otra masacre HATE ETERNAL/BRAIN DRILL. Sin embargo, cuando se despliegan mediante pequeños fragmentos de tipo Old School ni siquiera se inmutan, sorprendiendo gratamente y dando un relevo a la furia absoluta. Los solos de guitarra de Shogo Tokita son inacabables, en un constante devenir entre neoclasicismo metálico y el fraseo de fusión.

“Pandemonium” roza cotas HATE ETERNAL/MORBID ANGEL/AURORA BOREALIS, resultando una bestialidad de obvia crispación. La batería aporrea a mil por hora y los riffs son puro nervio, mezclando el Blackened/Death melódico y veloz con el Brutal Death de corte antiguo. De nuevo nos regalan un solo de guitarra insistente y de gran limpieza, sobre unas bases rítmicas simples pero demoledoras, como murallas de notas, impenetrables.

La marcianada continúa con “Black Palingenesis”, más retorcimiento supersónico en el que la baqueta rebota con sonido de metralleta, en el que algunas secciones vuelven a recordar al ofuscado sonido BRAIN DRILL, además de las correspondientes secciones que como fórmula de intercambio suelen implicar en todos los cortes, con muy buenos estallidos de bajo y guitarra, simultáneos y/o alternos. El riff post solo se convierte en un completo enmarañamiento de gran claridad sónica, ofreciendo base a la voz y creando buenos fragmentos e interacciones.

La cosa cambia totalmente a través de “False Oath”, cuya introducción electro-acústica sirve de preludio a una cascada de arpegios sobre cuatro acordes que crean una tensión controlada y llamativa, funcional, de claro sabor sinfónico y blacker. A partir de aquí comienza un medio tiempo de riffs más familiares sobre el que aparecen las estrofas, intercalado con salpicaduras rítmicas en diferentes modalidades, para finalmente culminar con los arpegios iniciales y una sucesión de ideas provenientes de los mismos y de la propia armonía, de forma cómplice y muy pegadiza.

“The Serpent Of Ishtar Gate” es una pieza impresionante, por conjugar magistralmente la técnica y el sentido orientado a la musicalidad. Desde los omnipotentes y envolventes fraseos y riffs hasta las voces completamente agresivas, volcadas en amasar auténtica ira, por no hablar de unos complejos juegos instrumentales cuya escucha es a su vez muy fácil de digerir, hasta terminar con una versión ligeramente distinta del tenso y envolvente motivo con el que abren el track.

“Stigmata” da carpetazo a este disco técnico e infalible, con un pasaje inicial que bien serviría para abrir cualquier otro trabajo o este mismo, por su sensación de fuerza y musicalidad. Recuerda a la onda de RINGS OF SATURN, pero mucho más comedido, vivo y dinámico. Buenísimo trabajo de los tres instrumentistas, que de pronto se abalanzan para parir lo que parece la canción más asfixiante del disco, mezclando tiempos muy lentos y cortantes (que desaparecen muy pronto) con su típico fraseo técnico y cierto sabor HATE ETERNAL. Hacia la mitad del track se despachan con un intercambio de golpes y cortes, donde hábiles silencios y contratiempos apuestan sus últimas bazas, antes de retomar lo que parece una batalla de blatings y fraseos espaciales. Hay que decir que la labor guitarrística de Shogo Tokita es impresionante, pues si algo queda claro es que tiene una muy personal forma de enfocar sus desarrollos e ideas, al margen de su posible mayor o menor originalidad.

En definitiva, si te gusta el Brutal Death Metal en su vertiente técnica y furiosa, este trabajo satisfará (muy posiblemente) tu hambre de música. Complejo pero directo y fácil de asimilar, algo que no se logra tan a la ligera, aunque esto sean simples apreciaciones personales. Al parecer van a emplear un segundo guitarrista para sus próximas giras, lo que a buen seguro les dará mucha más credibilidad en directo a la hora de poder reproducir mucho más fielmente las labores de cuerdas de su música, que no son pocas. Enormes DESECRAVITY, solo queda desearles lo mejor con la presentaciones de “Orphic Signs”, un trabajo implacable.

Deadly Storm (Czech)

Jedno nepsané pravidlo říká, že do mrtvol se nekope. Jenže vysvětlete to lidem, když mezi nimi bují čím dál tím víc agresivity. Jestliže si před pár lety chlapi dali před hospodou pár facek, tak dnes si rovnou řežou hlavu. Psychologové to vysvětlují závislostí na různých počítačových hrách, televizi a já nevím čím. Přitom se máme dobře jako nikdy v historii a nebýt uměle vyvolaných válek pro peníze, tak jsme spokojení jako pověstná prasata v žitě.

Lidem ale neporučíš. Možná za to může pradávná agresivita lovců bojujících o svoji kořist, která nejde v moderní společnosti dost dobře nahradit. Nevím. S čím jsem si ale absolutně jistý, je to, že pokud mě začne všechno okolo štvát, tak beru místo basebalové pálky do ruky raději nějaké dobré agresivní death metalové dílo. Druhý počin japonských samurajů DESECRAVITY se zdá být pro podobné poetické chvilky více než vhodný. Pánové se s ničím nepářou a jejich hudba je krutá jako oči zbytečných vrahů. Nekompromisní riffy kopají jako vzpouzející se kůň, vokál je hodně zlý a technika zde použitá dodává celé desce ještě větší tlak.

Zprvu na mě sice celý tenhle pozdrav z pitevny působil jako setkání s dobře seřízenými stroji na zabíjení v nějaké opuštěné továrně, postrádal jsem syrového ducha a pocit, že ještě hrají lidé, ale časem jsem si zvykl. Mé uši jsou otrlé a japonští válečníci mě nakonec vcelku přesvědčili. Kakofonie zdánlivě nesourodých a zmatených zvuků připomíná v určitých chvílích souputníky ORIGIN, HATE ETERNAL, SUFFOCATION, DEIVOS, chvílemi snad i DYING FETUS a ostatní techničtěji laděné party. Ekvilibristika je na prvním místě a vy máte (stejně jako vždy) dvě možnosti. Buď na tuhle spletitou a složitou hru přistoupíte a pokusíte se jednotlivé motivy rozuzlit nebo zbaběle utečete pryč. Se mnou to měli DESECRAVITY tentokrát těžké. Mám sice brutální death metal rád, ale spíš v jeho starší a temnější podobě. Tady to na mě byl někdy až moc velký chaos, pravděpodobně určený jen pro pár vyvolených a pak pro zástupy muzikantů, kteří si navzájem měří, kolik jsou schopni narvat riffů do jedné minuty. Z dlouho slyšeného zmatku na mě nakonec ale přeci jen vystoupila chladná a odmítavá duše poctivé death metalové práce.

Dovedu si představit, že DESECRAVITY budou v dnešní době vynášeni na samý piedestal minimálně letošního technicko brutálního roku, ale na mě jsou někdy možná až moc chladní. Trojice maniaků ze země vycházejícího slunce hraje sice s velkými zkušenostmi v rukou, s obrovskou porcí nadšení, ale pro mě postrádají kousek něčeho živého, co by mi je v mých očích alespoň trošku zlidštilo. Fanouškové extrémních preludií ale budou pravděpodobně na vrcholu blaha a dojde k nejedné strojově navozené extázi. Zvuk je totiž dokonalý, hudební výkony taktéž a vokalista také vládne poměrně mocným hlasem. Slabší jedinci utečou v panice pryč a zůstaneme jen my otrlí. Sice si někdy nebudeme s některými skladbami vědět trošku rady, ale před kolegy a kamarády budeme tvrdit něco o super desce. Ona to je samozřejmě svým způsobem pravda a mé neustálé stěžování si na hudbu bez duše je stejně jen prázdným házením střev na zeď, ale to mi nebrání se postavit k „Orphic Signs“ lehce odtažitě.

„Orphic Signs“ je klasickým, velmi dobrým, perfektním a svým způsobem dokonalým produktem dnešní doby. Skvěle zapadne mezi dnešní „moderní“ posluchače a troufám si předpovídat velké úspěchy. Já se samozřejmě v mnoha ohledech připojuji, oceňuji taktéž, velebím technickou zdatnost, schopnost složit zajímavý a „nový“ motiv. Klaním se před produkcí, obalem i celkovým dojmem. Jen budu mít na tuhle desku (stejně jako na ostatní z tohoto ranku), chuť asi jen občas. Možná je to mojí prací, kdy každý den slyším hrát v podobném taktu desítky strojů, nevím, ale na mě je to chvílemi až moc chladné. Mám raději pocit, že mi někdo chce vyrvat střeva z břicha a operovat mě bez narkózy, než jen setkání s „počítačovou“ hudbou. Když jsem novinku poslouchal řekněme třeba dva dny po sobě, neustále jsem se nemohl zbavit dojmu, že se musím zvednout a všechno to restartovat, stejně jako celý svět. Ve svém stylu se jedná rozhodně o velmi dobrou desku, ke které bych měl jen jednu malou výtku. Hrají na ni ještě lidé? Kvalitní technický brutal death metal z robotického Japonska.

Asphyx says:

I would like to listen and support older brutal death metal. I prefer the darkness and the next world before technical finesse. DESECRAVITY are very good musicians, the CD has a great production and interesting cover. But I have sometimes the feeling, there aren’t people playing here, only perfectly adjusted machines. Fans of the style will be very satisfied, I sometimes miss the soul. The album is very dehumanization, cold and uncompromising. There are days I’m very satisfied with the listening, but also moments, when I don’t develop the taste for “Orphic Signs”. Quality technical brutal death metal from robotic Japan.

Rock Hard (Slovakia)

Ďalšia výborná kapela, na ktorú som narazila vlastne náhodou a úplne ma zhypnotizovala už od prvých tónov. Že sú títo šialenci z Tokya, je poriadna haluz, keďže odtiaľ dokopy ani nič poriadne nepoznám. Teda aspoň donedávna to tak bolo. Je zvláštne, že veľa výborných albumov a teda aj kapiel som objavila až ku koncu roku a DESECRAVITY sú jednoznačne jednou z naj.

Chalani sypú šialený rýchly (nielen)technický brutalík nadpriemernej kvality, ktorý je ťažké len tak obísť bez povšimnutia. V porovnaní s debutom, ktorý už bol taktiež poriadny nášup, preskákali míľovým vývojom tým správnym šialeným smerom. Ich songy sú tak ostré a nákazlivé, že nebudete vedieť vypnúť repeat. Vycibrené riffy a melódie do poslednej notičky, natrieskané úplne nehoráznym spôsobom, len si mrknite ich oficiálny videoklip, z tých nenormálnych bicích ani nič podradné vyliezť nemôže. Vlastne ani príliš neviem opísať ich muziku, jedine že je proste vraždiaca, atmosférická, brutálna a technická, žiadne bezhlavé mastenice, DESECRAVITY tvoria svoje songy dušou! „Orphic Signs“ je môj ďalší tajný tip a jeden z trojky albumov roku 2014, ak máte radi trilkovačky v brutálnom podmaze, bez obáv sa doňho ponorte. Sklamanie je totálne vylúčené!

5/5
Moony